EL proceso de lamina y pintura consiste en restaurar las piezas del carro que han sido golpeadas o presentan deterioro en su color. Un buen trabajo es el que repara las piezas afectadas sin afectar las partes originales del vehículo. Una buena pintura mejora el aspecto de tu vehículo, previniendo además la corrosión y el desgaste.
Se realiza la reparación de golpes y rayones pequeños, repintando la parte afectada con pinturas originales, al igual que se hace reparación de piezas completas manteniendo las características de las pinturas originales de fábrica.